Palma de Mallorca es la ciudad española donde la inversión inmobiliaria resulta más productiva, con un crecimiento de precios del 16% en el último trimestre de 2017 respecto al mismo período de 2016. Esta ciudad y Málaga están tomado el relevo de Madrid y Barcelona en cuanto a rentabilidad, según se deprende de un estudio elaborado por Coldwell Banker España & Andorra.
El estudio compara la evolución de los precios en Barcelona, Madrid, Palma de Mallorca, Málaga y Valencia.
Es en esta última ciudad donde el incremento de los precios ha sido menor, con un aumento interanual del 2’8%. En Barcelona los precios bajaron ligeramente en el tercer y cuarto trimestre de 2017 a causa, según el CEO de Coldwell Banker François Carriere, de la situación política. Carriere recuerda que “en el último trimestre de 2017 las empresas inmobiliarias sufrieron en Barcelona un decrecimiento dramático de sus peticiones tanto en lo referente a clientes nacionales pero también internacionales. En algunos casos esta baja alcanzó el 80% e incluso algunos contratos llegaron a romperse, puesto que los compradores preferían perder las arras a exponerse a la incertidumbre”.
Sin embargo Carriere destaca las buenas perspectivas con las que ha arrancado el año en la capital catalana ya que a su parecer, “los mercados han descartado la independencia y las previsiones son de que os precios seguirán subiendo a lo largo de 2018 a un ritmo similar al de los meses previos a los meses de septiembre y octubre de 2017, siempre y cuando la dinámica política siga tendiendo a la normalización”.
A nivel nacional se ha generado una tendencia en el aumento del tiempo de ventas. La única excepción es Madrid. El encarecimiento de los precios sería la razón principal de esta tendencia.
En lo que se refiere al alquiler, Málaga es la ciudad que mostró mejor rentabilidad, presentando un alza de entre el 5,7 y el 6,7% interanual. Por parte de Madrid se registraron resultados interanuales estables.