Las obras de acondicionamiento en la Estación de Príncipe Pío concluirán en la primavera de 2021.
Madrid contará con la sala de música electrónica más importante de la capital y de las principales de España en la primavera de 2021. Los promotores de la sala Carola Morena se encuentran ya en negociaciones para traer a la capital a los principales dj del panorama internacional, una vez finalicen las obras de acondicionamiento que se desarrollan en la antigua Estación de Príncipe Pío, donde ya fue inaugurado el Gran Teatro Bankia, un proyecto de Luis Gómez, que finalmente vio la luz a pocos días del comienzo de la pandemia.
Carola Morena, la sala de música más rompedora de Madrid, está inspirada en los clubes neoyorkinos y forma parte del macro complejo de ocio instalado en la emblemática estación. Las obras de rehabilitación del complejo han comenzado ya con la reconversión de los espacios de la antigua Estación del Norte, que albergará la sala y un restaurante que pretenden ser un referente de ocio y cultura y uno de los motores del turismo en la capital.
Las obras del proyecto, en pleno corazón de Madrid, al lado de la Gran Vía, la Plaza de España y el Teatro Real, comenzaron antes de la pandemia y aunque los trabajos se han visto ralentizados por el estado de alarma, se prevé que culminen en la primavera del próximo año. Mientras, diseñadores, arquitectos y otros profesionales de iluminación y sonido están realizando las pruebas para convertir el espacio en el referente de la música electrónica a nivel nacional e internacional. De hecho, el diseño y la sonorización correrán a cargo de una de las compañías más importantes del mundo, al igual que la iluminación, que tendrá un diseño espectacular para incrementar la experiencia de cliente.
Más de 50.000 vatios de sonido inundarán la sala, que recogerá lo mejor de la música nacional e internacional de la que podrán disfrutar unas 800 personas, al margen de las que asistan a las sesiones privadas que tendrán lugar en una sala anexa.
Tras recibir la licencia municipal, los promotores de Carola Morena están rehabilitando los espacios interiores, sin tocar los elementos protegidos y manteniendo su exterior, la magnífica fachada de la Estación del Norte, símbolo de las comunicaciones madrileñas y una de las señas de identidad de la ciudad que hoy genera una especial relación de empatía entre el espacio y sus futuros clientes ya que la inmensa mayoría de ellos utiliza el transporte público y están concienciados con la sostenibilidad.
La compañía rehabilita las zonas con mimo, creando estructuras internas que preserven el espíritu de la estación, construida a principios del siglo XIX y catalogada como edificio singular. Por dentro, un ambiente de última generación, con las tecnologías más punteras; por fuera, las esencias de la vieja estación a la que se podrá acceder directamente desde Metro de Madrid y Cercanías, una circunstancia que marcará la diferencia entre Carola Morena y otros espacios a las afueras de la ciudad.
La sala cuenta con 1700 metros cuadrados, decenas de miles puntos de luz digitalizados y un sistema que garantizará la renovación permanente del aire.
Por su parte, la torre, donde se ubicará el restaurante con unas vistas impresionantes de la ciudad, dispone de 1500 metros cuadrados y prevé ser referente de la cocina tradicional, con toques de distinción. “Somos conscientes de que el sector no vive sus mejores momentos pero confiamos en que el próximo año, Carola Morena sea un espacio único”, afirman sus promotores, que ya están en contacto con las principales compañías de música para cerrar fechas de artistas internacionales de cara a la próxima primavera. “Nos está suponiendo un gran esfuerzo pero hemos puesto toda nuestra ilusión y ganas para que Madrid sea el referente de la música electrónica de España y del mundo. Creemos que hacía falta un espacio así en la ciudad”, afirman.
La sala tendrá dos entradas: la principal, a pie de calle, y otra desde el interior de la estación de Cercanías. En este caso, el acceso se efectuará desde la puerta de una antigua capilla, cuyos elementos arquitectónicos se mantendrán. Este acceso supone un atractivo más para los clientes ya que le otorga al lugar el misterio de los privados berlineses. Carola Morena tendrá también una zona exclusiva para clientes que quieran disfrutar de mayor intimidad, así como un espacio para conciertos íntimos con pocas localidades a la venta.